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domingo, 30 de noviembre de 2014

CARTA A MI HIJO/A

 
Imagen tomada de la red:  http://educacion.uncomo.com/articulo/como-tener-un-embarazo-sano-15512.html


Querido/a hijo/a. 

Te he soñado y en ese sueño me has envuelto en una gran esperanza y una poderosa fuerza. Vienes al mundo con algo muy grande y hermoso que reconozco y recojo en semillitas. Mi emoción es tan grande... Tenía que ser así y así será no es un secreto que el mundo está cambiando y que se necesitan de seres humanos cuyos valores renueven y remuevan este otro tiempo y tú hijo/a no me cabe duda serás parte de ese despertar, de esa magia que dejará de caminar dormida. A tu manera, siempre a tu manera, no dejes que nadie ni nada impida ese crecimiento, esa verdad, ese milagro que en ti vive. No veas nada como una gran responsabilidad porque te confundirá y debilitará. Siéntelo y disfrútalo desde el amor y la comprensión más grande, si no nace del amor, nunca será fértil. 
Tan chiquitito/a aún dentro de tu hermosa mamá y ya con esa fuerza y esa luz que mueve la ventana de nuestra consciencia y el motor de nuestro corazón. 
Hijo/a sé que no hay caminos fáciles y que en tu vida te encontrarás con muchos momentos de gran dificultad pero no has de rendirte la respuesta llegará en el momento oportuno y la reconocerás de inmediato. Tu corazón es un guerrero sabio, su brújula te guiará. Escúchalo, confía en él aunque a veces creas que es tan sólo un loco soñador y que se equivoca en algunas decisiones; quién no lo hace. Y si así fuera recuerda darle una nueva oportunidad. No se puede estar peleado con algo de uno y más cuando es tan importante. Nadie te va a comprender más que él. 
Es posible que caigas una y otra vez durante el periplo de la vida y que sientas desconfianza y te duelas de derrota o de tristeza en algunas ocasiones pero no te preocupes te levantarás cada vez más fuerte e iluminado y orgulloso de ti mismo/a. Sí, mi amor, eres tú quien se debe sentir orgulloso/a de esas victorias y entonces los demás también lo estarán aunque lo más importante es que tú te descubras orgulloso/a de ti y ese momento será de los más bellos y reveladores de tu valiosa vida. Nunca lo olvides. 
En este instante disfruto intentando escucharte dentro de mamá aunque sea en bajito con la orejita pegada a su tripa como lo hice con tus hermanas y ellas también quieren escucharte y recibirte en sus vidas como complice de sus juegos; aunque aún seas tan pequeñito/a tu fuerza, tu magia con esa energía que recibo en manantial me haces soñar despierto como si fueras una puerta abierta a los irresistibles misterios que aún están por venir .
 Este momento conectando contigo es inolvidable, un verdadero regalo. 
Hijo/ a te amo y es un amor inexplicable que te deja sin palabras. Estoy feliz de saberte en camino, aumentando la familia: creciendo dentro de la mujer que tantas maravillas me ha regalado y a la que amo y respeto con toda mi alma: tu bonita mamá. Estaré contigo de la manera que la vida me deje estarlo. No puedo estar para siempre hijo/a de la forma en la que me gustaría estar, pero te acompañaré de alguna manera, no lo dudes jamás. Gracias por elegirnos. 
Te amo, te amamos. 
 (Carta a mi hijo/ a)
 Escrita en uno de los momentos más felices de mi vida. 
Javier Ochoa  V.L, 2014 © 
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